Divulgación Científica IBMC

En una sociedad como la nuestra, con un porcentaje cada vez mayor de personas de más de 70 años, es lógico que los temas relacionados con el envejecimiento despierten un gran interés. No es de extrañar por tanto la numerosa asistencia a la decimoctava edición de la Ciencia con tapas, una actividad de divulgación científica que promueve el Instituto de Biología Molecular y Celular de la UMH en colaboración con FNAC Bulevar Alicante.

Para hablarnos de “Envejecimiento y Memoria” contamos con la participación de los doctores Salvador Martínez (Director del Instituto de Neurociencias) y Carmina Díaz Marín (Jefa del Servicio de Neurología del Hospital General Universitario de Alicante). Comenzó la doctora Díaz Marín hablando de envejecimiento saludable, recomendando una continua actividad tanto mental como física a lo largo de toda la vida, sobre todo a partir de los setenta. Por otra parte, también señaló que el hecho de que la memoria va cambiando con la edad (desgraciadamente siempre a peor) es algo intrínseco en nuestro desarrollo que no podemos evitar.

El Dr. Martínez, por su parte, puso de relieve la importancia de la investigación sobre el cerebro:  estudiar cómo se desarrolla, cómo se construye, y sobre todo, cómo distinguir un cerebro sano de uno cuyo funcionamiento ya no es normal. Para Salvador Martínez los problemas del cerebro son como pequeñas “goteras” que con los años acaban convirtiéndose en una gran mancha de humedad. Es fundamental, por tanto, una detección precoz de  esa “gotera”. Insistió en la necesidad de entender las bases biológicas del funcionamiento del cerebro para dar con las claves de un buen envejecimiento cerebral.

El formato de las Ciencia con Tapas implica una participación activa de la audiencia con sus preguntas y comentarios, que no faltaron. A la pregunta de cómo se miden las capacidades cognitivas de un cerebro, la doctora Díaz explicó los distintos test que se realizan con ese fin. Añadió que muchas veces el paciente no es consciente de su problema. Otras personas se interesaron por la relación entre memoria y Parkinson, o memoria y estrés, la posibilidad de emplear fármacos para el Alzheimer; o si la jubilación puede considerarse un “factor de riesgo” para el empeoramiento de la actividad cerebral. Todas ellas fueron respondidas como siempre en un lenguaje asequible y en la forma distendida en la que se desarrolla esta actividad divulgativa, que volverá a repetirse a lo largo del próximo año.

Luis Pérez García-Estañ